Llevo unos dias queriendo contar una de las anecdotas en la nieve pero siempre se me olvida. El caso es que mi companyera de trabajo (la que tiene el mismo rol que yo), que es de Iran, empezo a decir que si esquiaba mejor que cualquiera que si tal o que si cual. Y claro el viernes por la noche, en el bar del complejo, con unas cuantas cervezas, y nuestro jefe pinchando, pues se produjo el reto: una carrera el sabado entre los dos.

Aqui tengo que decir que Leila (asi se llama mi companyera) fue profesora de esqui cuando vivia en Iran (si, hay estaciones de esqui, y aparentemente buenas), asi que iba a ser un duro hueso que roer, pero yo sabia que aun con peor estilo esquiando podria ir mas deprisa que ella, pues arriesgo bastante mas. Ademas ella no hace mucho ejercicio, y a cualquiera sabe lo que quema las piernas cuando estas bajando rapido, asi que esa podria tb ser mi baza.

La carrera se transformo en el gran acontecimiento del finde de semana, la gente empezo a apostar, y al final de la noche ya habia $150 sobre la mesa. Al final este dinero fue destinado a la obra benefica de Oxfam, y tengo que decir que no fue mi idea, pero me alegre!

La carrera fue de lo mas emocionante, dificultada en gran parte por la cantidad de gente que habia, muchos tirados en el suelo, o intentando levantarse, Leila fue todo el rato chillando para que la gente se apartara. Yo, sin poder esquivar a uno que estaba tirado en el suelo, pase por encima de sus bastones, que el pobre intentaba recoger tras su caida. Durante la carrera nos adelantamos varias veces, esto os da una idea de lo disputada que fue.

Cuando quedaban unos 200m para llegar y en una zona de banyeras (montanyitas en la nieve, para los no puestos), yendo los dos a considerable velocidad y obviamente igualados, nos pegamos el gran pinyo el uno contra otro. Una colision en toda regla y ademas en el aire. Despues de formar un amasijo y caer durante unos cuantos metros, los dos intentamos levantarnos para seguir la carrera. Desfortunadamente uno de mis esquis estaba como 20 metros mas arriba en la montanya, y ella habia mantenido los dos suyos en sus botas, ese era el final de la carrera y yo habia perdido. Me ha tocado bajar a comprarle cafes durante toda la semana pasada, pero he sumado otra recaudacion para oxfam.

En otro orden de cosas el martes por la noche nos juntamos 20 energumenos (y energumenas) para ir a un bar en darling harbour a cenar mejillones. El trato es que pagas $18 dolares y comes todos los mejillones que quieres. Uhmmm, ya os podeis imaginar como iban las ollas de mejillones (acompanyados de patatas fritas). El record estaba en 7. Es dificil calcular cuantos se comen, pues compartes la mayoria, pero yo creo que cayeron entre 3 y 4, habia espacio para otro mas, ya se sabe, la gula, pero el hecho de uqe tenia que pedalear casi 10km de vuelta a casa, pues me hizo tranquilizarme con los moluscos. Aunque al final tuve la grata sorpresa de que alquien vivia donde yo y pude meter la bici en su coche. Lastima, podria haber comido algo mas de marisco ;-)
- posted by vir @ 1:05 a. m.