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jueves, 18 de junio de 2009
tercera parte de la caminata
Bueno, pues gracias a Jose Antonio hemos podido indentificar a nuestro amigo el gusano-planta de ayer. En realidad se llama "Cordyceps sinensis" y es un hongo que crece en un gusano. La foto hace justicia a lo asqueroso que es. Y para los que quieran saber mas sobre el tema y sus poderes curativos aqui hay algunos enlaces:
Cordyceps sinensis en wikipedia
importante en la medicina tradicional china
aqui hasta se puede comprar

Y siguiendo con el pateo en si, decir que el primer valle es la zona del distrito de Manang, donde tambien esta previsto que llegue una carretera en breve (un par de anyos?) lo que sera una autentica pena, pues seguro que le quita encanto a esta zona. Al final va a ser como el campo base del everest al que ya se puede llegar conduciendo. Pero no desanimaros, pues en Nepal hay infinidad de caminatas para hacer y picos a los de subir, y no hay que quedarse con los conocidos que son everest o annapurna.

Los primeros dias, fueron bastante duros, entre que nuestras piernas se acostumbraban a la paliza y que no dejabamos de subir, una media de unos mil metros diarios, que en realidad son mas, pues hay muchas subidas y bajadas. Ademas cada dos por tres tienes que atravesar puentes colgantes, de diferentes longitudes, y unos estan en mejores condiciones que otros. Yo personalmente los disfrutaba un monton, pero Raul lo pasaba un poco peor. Para ser honestos algunos se movian que era cosa fina.

Despues de 5 dias de paliza, y aunque no estaba planeado, nos paramos un dia en Manang. Te recomiendan la parada en esta poblacion (3.500m) para que te acostumbres a la altitud, pero nosotros lo hicimos mas para descansar las piernas, y tener un dia sin cuestas.

Por el valle de Manang las poblaciones son muy budistas (religion mayoritaria en Nepal junto al hinduismo), y cuanto mas alto mas se parecen a los tibetanos. Hasta nosotros nos aficionamos a rodar las ruedas de oracion que estan en todos los pueblos. Por no mencionar las banderas budistas de colores que tambien estan por todos los lados, especialmente en los picos y los pasos elevados. Por supuesto nosotros pusimos una ristra en el paso de Thorung-la.

Por esa parte los alojamientos, en casa de huespedes, son bastante basicos, y aunque por ser temporada baja tambien son muy baratos, se supone que vas a cenar y desayunar en la casa, lo que al final les supone una fuente de ingresos para vivir. Y lo de las comidas, pues muchas de ellas son basicas, a base del famoso Dhal-bat (a base de arroz con lentejas) aunque por las manyanas descubrimos el pan tibetano, que ademas de estar buenisimo te da energia para toda la manyana.

Un caso curioso fue cuando en manang fuimos a cenar y solo estaba la hija de la casa, de unos 10-12 anyos. Nosotros pensamos que avisaria a la madre o se esperaria, pero no fue asi. Ella se puso a cocinar. Por aquellos lugares no es extranyo que se tarde entre media hora y una hora en servirte la comida, pero ese dia lo llevaron al extremo. Despues de unos 45 minutos y ver a la ninya de lo mas nerviosa entrando y saliendo de la cocina, me interese por el estado de nuestra cena y ella me dijo que sin problema. Luego oimos un par de explosiones en la cocina (ellos cocinan con olla express en fuego de lenya) y la ninya que corrio a avisar a una vecina. no veais el trasiego en la cocina y nosotros con cara de tontos en el comedor. Yo volvi a interesarme y a decir que no era problema que podiamos esperar a la madre o incluso ir a otro sitio, pero la vecina insistio en que no, que la ninya era pequenya pero muy lista. resignacion. al final, y despues de casi dos horas y media de espera, llego nuestra comida, las lentejas y el arroz eran todo una pasta de lo demasiado que lo habian cocinado, pero nosotros no protestamos y la ninya se quedo tan contenta. Otras veces las experiencias fueron mucho mejores.
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